Devociones de Cuaresma

Miércoles, 30 de marzo

Por ti y por mí

Porque a su debido tiempo, cuando aún éramos débiles, Cristo murió por los pecadores. Es difícil que alguien muera por un justo, aunque tal vez haya quien se atreva a morir por una persona buena. Pero Dios muestra su amor por nosotros en que, cuando aún éramos pecadores, Cristo murió por nosotros. Romanos 5: 6-8

¿Qué estaríamos dispuestos a hacer por aquellos a quienes amamos? No lo sabemos hasta que llega el momento. Conocemos muchas historias conmovedoras acerca de lo que alguien es capaz de hacer por amor. No se trata de que la persona amada merezca o aprecie lo que estamos haciendo por ella. Pero sabemos que el amor rescata vidas perdidas. Salva. Cura. Cuántas madres claman a Dios por un hijo adicto, por una hija rebelde, con la esperanza de que ese amor toque el corazón y lo transforme. Y mientras tanto perdonan, exhortan, dan, reciben, sufren. Hasta lo indescriptible. ¡Hasta comprometer la propia dignidad!

¿Qué estuvo dispuesto a hacer Dios por rescatarnos del barro y la miseria en la que nos encontrábamos? ¿Qué vio Dios en nosotros para hacer semejante sacrificio? ¿Qué es lo que ve hoy? Francamente da náuseas. Provoca profunda decepción: violencia, codicia, envidia, soberbia, falsedad, mentira, opresión, egoísmo, inmoralidad, desidia… la lista podría ocupar una página entera. ¿Por qué Dios haría algo bueno por personas así? ¿Por qué Dios entregaría nada menos que a su Hijo por una humanidad tan pervertida? No hay otra respuesta: fue por amor. Pero Dios muestra su amor por nosotros en que, cuando aún éramos pecadores, Cristo murió por nosotros. 

No es que habíamos comenzado a cambiar y caminábamos hacia Él. No. Estábamos ocupados en pecar. Y, sin embargo, su amor no podía hacer otra cosa. Lo hizo por ti y por mí. Arrepiéntete. Confía. Vive en ese amor.

Padre Santo: me conmueve el amor inmenso que has demostrado por mí. Sé que no lo merezco. Ayúdame a confiar. Amén

Para saber más, imprimir o escuchar los devocionales de Cuaresma, haz click aqui.

(Devocional extraído de la serie: Por ti y por mi – www.paraelcamino.com)